viernes, junio 14, 2019

Hablando con él

Durante todos estos años mil ideas han venido a mi, muchas sobre la percepción que tengo, sobre la conexión que existe entre el macrocosmos (él) y el microcosmos (específicamente, yo).

La biblia es un libro de más de 500 hojas, comprende de dos volúmenes llamados testamentos, No está escrito por dios, aunque la gente lo atribuya a él, siendo correctos, fue escrita por hombres, corregida por otros tantos que decían haberse inspirado en Dios para su concepción. la mayoría de libros fueron escritos antes del siglo 4, cuando Constantino nombró al cristianismo como religión oficial del imperio Romano, además de haber seleccionado los libros que contendría la Biblia, varias revisiones posteriores, que terminaron oficialmente con la Reina Valera de 1960 han editado, modificado los nombres de Dios, palabras ¿confusas? etcétera.

Este libro contiene algunas enseñanzas pero otro montón más grande de incongruencias, prejuicios y cosas absurdas.

A nivel sensorial, puedo decir que mi ser no es aceptado del todo por esos prejuicios pero a mi me hizo Él, a mi no me creo el diablo, y hablo con la verdad, al hacerlo puedo decir que el macrocosmos se hace presente en mi voz, a través de mi receptor neuronal que traslada sus descargas eléctricas en ideas, palabras, letras.

Todos sabemos lo que está bien y lo que está mal, Él (no tiene genero), Dios es energía pura, sin forma, al menos no que los ojos humanos puedan detectar, (además de que nuestras conciencias se encargan de crear ésta realidad). En todos a pesar de nuestras decisiones habita parte del Macrocosmos, ya que somos Microcosmos, replicas a escala de él, que puede hablarnos, no con palabras, pero tambien en nuestros interiores vive la fuerza contraria, no puede haber luz sin sombra, no hay ying sin yang, por eso hay gente que se considera buena y realmente resalta su parte negativa, porque ambas habitan en cada ser.

Debemos abrirnos a recibir esos mensajes, a captarlos, analizarlos y traducirlos, sabiendo que Él solo busca el beneficio de la humanidad, no su autodestrucción, esa es la parte oscura, que también habla y a veces el receptor puede equivocarse en quien es el que manda el mensaje, por eso es importante diferenciar lo que está bien, lo que está mal, las consecuencias de nuestras palabras y ver el futuro, no verlo textualmente, analizar y pensar a futuro las consecuencias de nuestras palabras y acciones.

Todos podemos despertar nuestra conciencia, saber que el nos habla personalmente y no a través de hojas escritas por hombres, su lenguaje vive en nuestros interiores, en nuestras mentes y corazones.